Tendinitis de los tibiales: Qués es, síntomas, tratamiento y prevención

¿Qué es la tendinitis de los tibiales?

La tendinitis de los tibiales es el término que se le da a cualquier inflamación en el tendón tibial posterior. Debido a la gran cantidad de fuerza que atraviesa este tendón, la causa más común de tendinitis tibial posterior es el uso excesivo y las lesiones. El uso excesivo conduce a la inflamación del tendón, que con el tiempo a menudo puede conducir a la degeneración del tendón. El tendón tibial posterior se extiende a lo largo del interior del tobillo y se adhiere al pie debajo del arco. El tendón tibial posterior puede ser especialmente propenso a la tendinitis ya que ayuda a mantener el arco del pie y evita la sobre pronación del arco mientras caminas o corres.

La tendinitis tibial posterior puede ser el inicio de la tendinosis tibial posterior (degeneración del tendón), pasando a una disfunción del tendón, donde hay una pérdida progresiva de fuerza y un aplanamiento progresivo del arco del pie a medida que el tendón se degenera y se alarga con el tiempo). Años de sobre pronación (pies planos) o anormalidades biomecánicas pueden conducir a la progresión de la tendinitis a la disfunción del tendón tibial. Esto generalmente ocurre cuando hay demasiado más estrés en el tendón de lo que es capaz de soportar. Una vez nos encontramos con degeneración e inflamación del tendón, tanto el dolor como la inflamación pueden aparecer y desaparecer rápidamente, pero finalmente el problema puede volverse más permanente o crónico, lo que puede llevar a la disfunción.

La progresión de estas afecciones se desarrolla de la siguiente manera:

  • Tendinitis posterior de la tibia: por lo general, a corto plazo después de una lesión, rotura o cuando se produce el dolor en el tendón por primera vez.
  • Tendinosis tibial posterior: cuando el dolor del tendón ha estado presente durante algún tiempo y el tendón se degenera dolorosamente. En esta etapa, a menudo ya no se inflama a menos que se vuelva a lesionar.
  • Disfunción del tendón tibial posterior: cuando el daño es tan severo que hay alargamiento y degeneración del tendón, acompañado de déficit de fuerza.

 

Causas de la tendinitis de tibiales

La tendinitis de los tibiales se produce cuando el músculo se usa en exceso y el tendón se encuentra tenso. Teniendo en cuenta que la tendinitis es una afección inflamatoria, la tendinitis tibial aparecerá después de un aumento repentino de actividad o ejercicio, especialmente después de una lesión. También puede inflamarse debido a la tensión repetitiva con algún déficit biomecánico, pies planos, o zapatillas inadecuadas. La artritis y el desgaste normal también pueden causar cierta pérdida de elasticidad en las fibras del tendón, lo que puede causar cierta incomodidad durante la actividad física excesiva.

 

Síntomas de la tendinitis de tibiales

Los síntomas de la tendinitis tibial posterior incluyen dolor e inflamación a lo largo del interior del tobillo y el arco del pie siguiendo el curso del tendón. En muchos casos, puede haber dolor al caminar o correr. Si hay una rotura en el tendón tibial posterior o si se produce un importante daño, el dolor puede estar presente incluso en reposo. El dolor y la inflamación son signos de lesión del tendón. En algunos casos, la funda o manga que rodea el tendón producirá cantidades excesivas de líquido lubricante ayudando al tendón se deslice más fácilmente durante el proceso de curación. Esta producción excesiva de líquido es lo que produce la inflamación que el paciente ve y siente en el interior del tobillo y el arco. En casos agudos, si la tendinitis tibial posterior no cicatriza adecuadamente y no se trata adecuadamente, la incomodidad puede aumentar y la lesión puede derivar en una disfunción. Similar a la tendinitis, el dolor asociado con la disfunción del tendón se localiza a lo largo del tendón alrededor del interior del tobillo o a lo largo del interior del arco.

 

Tratamiento de la tendinitis de tibiales

El tratamiento para de la tendinitis de tibiales depende de cuánto tiempo han estado presentes los síntomas y la causa que la provocó. El tratamiento debe tener en cuenta la causa de la lesión, y si el tendón está inflamado y/o degenerado, cuánta pérdida de fuerza se ha producido y si hay signos de disfunción del tendón tibial posterior.

Teniendo en cuenta estos factores, las modalidades de tratamiento que pueden recomendarse incluyen medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, aplicación de frío, vendajes,  reposo, y aparatos ortopédicos. Los aparatos ortopédicos no son siempre necesarios pueden no ser siempre necesarios. Pero en los casos indicados, pueden permitirte reanudar tu actividad normal. Dichos tratamientos se recomiendan caso por caso, y como tal, se puede recomendar reducir todas las actividades físicas durante varias semanas para permitir que la inflamación y el dolor desaparezcan y se produzca la curación.

Los médicos o fisioterapeutas pueden reducir los síntomas al limitar la actividad para controlar el dolor y la inflamación. Hay que reposar unos días y luego ir aumentando la actividad física muy lentamente.  El descanso permite que los tejidos se curen.

Se pueden requerir ejercicios de rehabilitación en etapas posteriores cuando la tendinitis ha mejorado dejando atrás la inflamación o si hay tendinosis (degeneración a largo plazo). Los tratamientos de fisioterapia con los que nuestros podólogos pueden ayudar incluyen ultrasonido, masajes de tejidos blandos, ejercicios de fortalecimiento y calor. Tu médico o fisioterapeuta podrán mandar una serie de ejercicios que ayudarán a fortalecer el músculo tibial posterior y los músculos pequeños dentro de los pies, ayudando así a sostener el arco del pie.

En los casos más graves de inflamación o cuando hay a rotura de fibras, es posible que se requiera un ultrasonido para un examen más profundo. Se pueden utilizar tratamientos adicionales, como un escayolado desde la rodilla hacia abajo, durante cuatro a seis semanas para permitir que el tendón descanse y sane por completo. Si estas medidas no producen resultados aceptables, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para limpiar el tendón y reparar cualquier defecto. La reparación quirúrgica se necesita con mayor frecuencia cuando hay una debilidad progresiva y/o un alargamiento en el tendón, como el observado en  la disfunción del tendón tibial posterior .

 

Consejos para prevenir la tendinitis de tibiales

  • Usa zapatillas que proporcionen amortiguación, soporte y absorción de impactos.
  • Usa aparatos ortopédicos con suficiente soporte para el arco del pie,  que estén construidos con materiales amortiguadores que absorban los impactos.
  • Varía las rutinas de ejercicios. La variedad mantendrá a todos los grupos de músculos bajo presión continua.

 

Puedes favorecer este tipo de lesión utilizando tape (vendaje neuromuscular). Puedes ver cómo en este video:

 

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